Si algo tiene esta salsa es que gusta a todo el mundo a discreción, lo mismo da que la pongas con pasta caliente, que la pongas de aliño para una ensalada, en una pizza o incluso que la untes en el pan de una torta o de una focaccia, ¡siempre triunfa!
Cada vez que tengo la planta albahaca con mucha hoja y a punto de empezar a florecer aprovecho para hacer un buen podado de jardinera y hago salsa pesto para varios platos y tener en la nevera durante varios días, debo decir que al ser una salsa muy aromática va perdiendo un poquito de aroma según pasan los días pero perfectamente aguanta en un buen refrigerador unos 5 ó 6 días.
En este caso la utilicé para una ensalada de pasta capresse, otro día una clásica pasta al pesto e incluso el fin de semana la untamos en el pan de bolillo que llevamos a la playa, tenían un toque diferente y delicioso.
No me enredo más y os lanzo los ingredientes con la fácil y simple receta, el que no incluye esta salsa más a menudo en su dieta es porque no sabe lo simple y sencillo que es.

Salsa Pesto
Utensilios
- Procesadora
Ingredientes
- 80 gr Hojas de albahaca
- 2 Dientes de ajo
- 30 gr Piñones o algún fruto seco*
- 80 gr Queso parmesano
- Sal al gusto
- 150 gr Aceite de Oliva / virgen extra
Vamos al Lío!
- Lavamos, secamos y ponemos las hojas de albahaca en la procesadora junto con todos los ingredientes secos y trituramos durante un 30 segundos.
- Una vez picado ponemos el aceite de oliva y volvemos a triturar a baja potencia, solo para emulsionar. Es el momento de probar y poner la sal al gusto, recomiendo ser prudente con la sal puesto que el queso parmesano es un queso curado normalmente salado y puede que incluso no necesite incorporar más sal.
Notas
